La parte que no se cuenta
Ayer me llegó un vídeo donde una de las componentes de la comitiva del partido Compromís se encaraba con los asistentes a la Procesión Cívica de la Real Señera del pasado miércoles 9 de octubre que les increpaba.
Una actitud chulesca, macarra e impropia de unos políticos que deberían saber que en el sueldo abundante por hacer casi nada les va el poder ser abucheados por la calle como hicieron multitud de valencianos durante todo el recorrido. Unos abucheos más que merecidos por su falsedad identitaria que les permite sin sonrojo alguno portar la Real Señera Coronada por la mañana y acompañar a los separatistas catalanes por la tarde esteladas en mano.
Lo peor es el silencio de muchos medios, como Las Provincias, que se supone valencianista en el que aún recordamos aquellas columnas históricas de María Consuelo Reina, que no sabemos si por mandato nacional de su grupo Vocento original del País Vasco o por otras razones, suaviza los términos llamando “nacionalistas” a los de Compromís en lugar de denominarlos como lo que realmente son, una panda de catalanistas sin ninguna vergüenza.
Esas imágenes no dejan lugar a dudas de lo que el pueblo piensa de ellos. Como tampoco deja dudas del descenso progresivo en intención de voto que un año y medio después de las Municipales muestran todas las encuestas sobre esta coalición comunista y separatista.
El pueblo está cansado de crispación política y social. La moderación que ofrece Mazón a pesar de hechos como la ruptura con Vox va calando en la gente y la recuperación progresiva de algunas libertades, sobre todo con levedad la lingüística, no pasa desapercibido. Como ejemplo puede ser que nadie hable de que la propia fallera mayor de Valencia cite en su discurso de despedida alguna frase del catalanista Estellés o que combine las dos sensibilidades lingüísticas, el valenciano real, de calle con el impuesto ideológicamente por el nacionalismo catalán de la AVL.
Esto es muestra de LIBERTAD, esa libertad que había sido cercenada obligando a contravenir la Constitución que permite hablar cualquiera de los dos idiomas oficiales sin que por ello te puedas ver perjudicado.
Puedes estar de acuerdo o no, pero es su libertad.
Compromís está en decadencia, lo sabemos, lo saben. Pero siguen ofreciendo esa imagen de reírse de todo el mundo a pesar de que la treintena de adeptos que estaban arrinconados en la calle Periodista Azzati, rodeados de policías para evitar enfrentamientos con otros grupos antagónicos, mostraban actitud desafiante y prepotente, con una charanga para acallar lo que luego fue imposible hacerlo, los gritos y abucheos de la gente de la calle que está muy cansado de ellos, de los profesores correligionarios que aún siguen con la matraca “dels Paisos” y de los medios afines que siguen mintiendo sobre todo lo que les concierne, llamándoles “valencianistas” o “nacionalistas”, cuando ya he dicho antes lo que en verdad son.
Pero ¡ojo! PP y Vox, ojito con estos que tienen muchos relatos sociales ganados que va a ser difícil desanclar de la vida diaria que pueden ser utilizados para intentar revivir.
No les creáis muertos, para nada. Son expertos en renacer con manipulaciones mediáticas e históricas. Están como locos buscando una nueva “Oltra”.
Lamentable esta imagen que nos dejó Compromís el pasado 9 de octubre como lamentable es que sigan existiendo y siga habiendo valencianos que les voten.
PEPE HERRERO
