Las técnicas de la gradualidad y de la distracción de la manipulación mediática de masas les está funcionando a las mil maravillas.
Van metiendo poco a poco leyes y medidas que son aceptadas como normales dentro de la gradualidad y a la vez, matando de un tiro dos pájaros, distraen de los verdaderos problemas.
No importa que tengamos récord de paro, ni récord de caída del PIB, ni que haya 50.000 muertos por la nefasta gestión de este gobierno, ni que la Fiscalía haya bloqueado las querellas contra el Gobierno, tampoco los escándalos de Podemos, no.
Lo que importa es ir creando leyes para ir controlando lo que puedes y no puedes pensar.
Así vemos como la ministra de Igualdad dijo aquello de que “decir que la violencia no tiene género, será estar fuera de la Ley”.
Ahora, decir que Franco venció en una guerra en la que de haber perdido España se hubiera sumergido en una etapa tan negra como ser parte de la otra parte del telón de acero y se hubiese convertido en un satélite ruso al más puro estilo de los países con dictaduras comunistas, parece que va a ser delito.
O decir que Franco construyó pantanos, creo la Seguridad Social o apenas se pagaba el ITE, la antesala del IVA, puede ser motivo de una multa gorda parece ser.
Es decir, negar la historia te puedes costar caro.
No hablo de estar de acuerdo o no. Si no de ser una herramienta más de la estrategia del control de la ideología como otras tantas que están usando desde el principio de la pandemia.
Les preocupa la represión durante el franquismo pero no investigar los 380 asesinatos de ETA pendientes de resolver.
Dicen que exaltar la dictadura será delito pero si es comunista como la venezolana, cubana o china la moldearán para justificarla.
Dicen que Franco fue un genocida pero Stalin o Castro parecen angelitos y babean por ellos.
No puedes pensar que, como casi todos los países, entrar en pateras es ilegal. Que alguien explique porque ninguna de ellas va a Portugal.
No puedes decir que la ley de violencia de género no está reduciendo las muertes de mujeres a manos de sus parejas pero sí que está engordando chiringuitos feministas que a lo que más llegan es a enseñar como se puede masturbar una mujer o que las abogadas feministas animen a las mujeres a denunciar agresiones falsas para quedarse con el piso, el coche y los hijos y hundir al hombre perjudicando a las mujeres que realmente lo están pasando mal generando muchas dudas, lo que hace sufrir a las que son agredidas de verdad.
No puedes decir tantas cosas que poco a poco van socavando la libertad de poder pensar como quieras porque te conviertes en delincuente o te cierran cuentas de redes sociales.
Lo propio de una dictadura. La dictadura ideológica propia de una republica comunista.
Y a eso nos dirigimos con la habilidad de la izquierda y la torpeza de la derecha.