¿Que pude haber detrás de esta tragedia?
Por Pepe Herrero
Las próximas semanas no se va a dejar de hablar de la tragedia del Medusa. Vamos a ver una lucha encarnizada por eludir responsabilidades. Y no hablo ya de las razones del accidente, si no de todo lo que envuelve a este suceso que va más allá de lo que en principio pueda parecer.
Porque tirando del hilo vemos detalles que a partir de ahora van a ser protagonistas. Como la razón de que el festival sea dirigido por un primo del alcalde socialista de Cullera a quien en un principio no le fue concedida la autorización, inicialmente le fue concedida a Farnam Khaligh, de la empresa "82 Sound Beach Festival". Que el alcalde sea alto cargo en el área de turismo de la Diputación de Valencia, o de que entre los dos socios de la empresa que parece que es la matriz, Piquente S.L., hayan montado en los últimos meses hasta 18 empresas distintas con 14 de ellas domiciliadas en la misma dirección, Ctra Favara, 11 de Cullera.
Os adelanto que este suceso también puede desencadenar un “divorcio” entre la organización y la propia Generalitat Valenciana quien de manera lógica tendrá que intentar eludir responsabilidades políticas después de que Puig tomara medidas para la ola de calor que se venía este fin de semana pasado evitando tomar ninguna de ellas con los festivales musicales en marcha, el Medusa y el de Villena llamado “Rabolagartija Fest”, tratando así de demostrar que dejar seguir el Medusa no fue por ninguna presión política de altos cargos socialistas a Chimo Puig o a la propia Gabriela Bravo quien ayer lo dejaba muy claro incluso contradiciendo al propio Puig.
Un divorcio que hay que ver si alcanza a los indicios de la existencia de un lobby del ocio que parece que se ha instalado desde la propia Agencia Valenciana de Turismo con el socialista Francesc Colomer al frente donde les acusan de que siempre se les dan los grandes eventos a las mismas empresas o los mismos (escasos) empresarios del ocio, o el papel del propio Fotur en todo esto. Detalle que podría explicar tantas empresas nuevas en tan poco tiempo de los organizadores del Medusa. Por cierto, sería interesante conocer el nombre de las empresas que han gestionado el Medusa en años anteriores.
También ver si la creación de la marca “Meditarranew Fest” por parte de la propia AGV para promocionar los festivales de música en la Comunidad Valenciana no es más que una tapadera para subvencionar de forma “legal” a estos festivales, entre ellos el Festival de la Dona, por ejemplo.
O demostrar que la construcción del Medusa no va en contra de la Ley de Costas con la construcción de una piscina a pesar del “Pativel” con el consentimiento del alcalde Jordi Mayor Vallet y si él está detrás de todo esto o no. Su papel viendo los hechos deja muchas dudas que tendrá que aclarar.
Muchas sombras que ponen en duda cómo y de que manera va a seguir el Medusa el año que viene, si su legítimo propietario a quien originalmente se le concedió recuperará el festival, aunque para ello el Ayuntamiento de Cullera deberá entregar el expediente negado hasta ahora, o si esto supone la desaparición del mismo. También estaremos atentos a ver que sucede con las 18 empresas que han montado entre el primo del acalde, Andreu Piqueras Vallet y su socio Javier Crecente, conocido por ser el que decide quien actúa en el festival y quien no.
Muchas dudas que hará que se investigue si hay una posible corrupción del PSPV en el sector del ocio de la Comunidad Valenciana y quienes están implicados. Los empresarios de la noche que no están en el este “lobby” lo saben muy bien.
En los resúmenes de titulares os iré avanzando las novedades que pueda haber en este tema, que os aseguro no van a ser pocas.
Por cierto, no estoy descubriendo nada, estoy avanzando algo de lo que se va a hablar en los próximos días.
