ARTÍCULO DE OPINIÓN
Que la calidad de la sanidad valenciana ha empeorado muchísimo en los últimos años lo sabemos todos es más, lo estamos sufriendo todos. Hoy en día tenemos el temor a padecer alguna dolencia por los grandísimos problemas que nos causa tener que pedir cita para cualquier especialista.
Pero esto no es ni más ni menos que el resultado de una gestión que llevo diciendo mucho tiempo que es tan nefasta como ideológicamente negativa. Solo conocemos algunos detalles pero la realidad supera todo lo que nos podemos imaginar.
Dentro de nuestro desconocimiento de lo que sucede en las entrañas del funcionamiento interno de todo el entramado sanitario, podemos entrever algunos detalles que nos pueden dar una idea de por dónde van los tiros. Desde la reversión de hospitales privados para hacerlos públicos por razones puramente ideológicas aunque luego funcionen peor, hasta la ocupación de hospitales como nos llega desde las propias habitaciones de los mismos.
Es por muchos comentado que entre compromís y el partido socialista se han repartido algunos hospitales con el fin de enchufar a los suyos. Así las malas lenguas hablan de que el hospital clínico ha sido colonizado por los socialistas y el Hospital general por los de compromís esto cuadra con que el nuevo conseller de Sanitat sea el anterior director del Clínico. Posiblemente, de ahí que se sepa tanto del mal funcionamiento del Hospital General, porque al ser de compromís los socialistas no tienen ningún problema en airear las carencias que tiene gracias al control de la prensa que tienen dentro de esa guerra que se llevan dentro del Botanic.
Y como siempre ¿a pagar? el ciudadano de a pie que tiene que aguantar los desmanes de estos gobernantes que nos están hundiendo la sanidad valenciana con el silencio de los medios que sacaban portadas y portadas por unos trajes o un bolso.
También con el silencio de unos sindicatos que si en lugar de gobernar la izquierda gobernara Ayuso, estarían todos los días en la calle y en la puerta de todos los hospitales valencianos. Pero así están callados. Tenemos claro que los sindicatos mayoritarios no se van a mover mientras que gobierne la izquierda y esperarán a que gobierne la derecha y para movilizar a sus afiliados.
Lo peor es que ya hemos visto como un ciudadano ha fallecido por la falta de médico en el SAMU y eso si que nos debería preocupar, mañana podemos ser nosotros o un familiar nuestro. Entonces ya nada valdrá.