ARTICULO DE OPINIÓN. POR PEPE HERRERO
Detecto algo que quiero compartir con vosotros. Pero no para que nos confiemos, si no para que sigamos el mismo camino y continuemos trabajando para erradicar el virus del catalanismo.
Veo este movimiento entre agotado y desmotivado.
Por una parte, ven como cada día que pasa, la calle pasa más de ellos y de sus tropelías. Y son pequeños detalles en los que hay que fijarse para entender el momento.
Por mucho que ellos sigan con esos intentos y sus dislates de intentar demostrar que somos parte de unos países que no existen, se saben perdedores, a lo Putin, tienen el poder, el dinero, pero no la simpatía del pueblo.
RECHAZO EN LAS REDES
Cada vez son más las voces que sin ningún rubor se atreven a sacar en las redes su rechazo, como anteayer un tuitero, Bruno Fernández, que enumeró una gran lista de pueblos valencianos en castellano, como los hemos nombrado toda la vida. El debate estaba servido, pero con un cambio, la victoria moral de los que defienden que se llame a estos pueblos como cada uno quiera. Así los argumentos de quienes defendían que solo se les llamara en valenciano se desvanecían en las tinieblas de los trolls que trataban de imponer su doctrina en vano.
CONGRESO NO ALS PAISOS CATALANS
Otro detalle es que os dije tras el congreso de “No als paisos catalans” que se celebró el 10 de febrero en el Ateneo con las cuatro entidades conocidas que provocó que dese Compromís se diera la orden nacional de no usar para nada ese término en ningún ámbito, hecho que al cumplirse tiene un efecto contrario, ellos lo saben muy bien, lo que no se publicita, no se vende. Y así ese término ha desaparecido en gran medida en la vida social valenciana. Saben que es contraproducente ante la caída de votos importante que saben que van a sufrir.
Como también es contrario a sus intereses electorales la presencia de esteladas que reducen al máximo para actos muy privados. Tras casi cinco años del golpe de estado catalán, ven como no ha servido más que para criminalizar al separatismo. Un separatismo que en Cataluña también va a la baja a pesar de los intentos de los gobernantes. Descenso que también llega a Valencia donde las banderas independentistas catalanas son invisibles. Airearlas supondría darle alas a la derecha y argumentos contra Compromís. Así, tras los primeros intentos de ponerlas en puentes como el de Picaña a Paiporta, retirado de inmediato por la policía, ya no ha habido más intentos.
RECHAZO EN LA ENSEÑANZA
Hay otro detalle muy importante. Los padres y profesores que cada vez en más número se rebelan ante la dictadura en la enseñanza y luchan para que sus hijos puedan estudiar en el idioma que quieran, sin duda, la asociación señera de esta batalla es Hablamos Español, que son los que han conseguido que el Supremo obligue a estudiar en español el 25% de las asignaturas en Cataluña.
PARTIDOS POLÍTICOS
Los partidos de centro derecha han visto que este anti catalanismo es un arma contra la izquierda y la intentan rentabilizar de la forma más sincera posible, pues la manera en la que impostan este rechazo es difícil de encajar con la realidad de que fueron ellos los que alfombraron el camino que ahora recorren los partidos simpatizantes del separatismo catalán en Valencia. Pero bienvenida sea esta transformación. Siempre y cuando la mantengan cuando lleguen al poder.
CRÍTICAS A ENTIDADES MUNICIPALES
Las críticas en las redes escritos de empresas o entidades municipales cuando lo hacen en catalán puro van en aumento. Así vemos como cuando la Junta Central Fallera escribe en catalán en sus redes o la Policía Local también lo hace, de inmediato reciben multitud de quejas y críticas. Tanto es así, que en las redes de Junta Central Fallera han tenido que borrar comentarios que los dejaban en evidencia y bloquear más respuestas. Hechos que han provocado que el anterior delegado de medios abandone el puesto por las críticas recibidas. Hecho que, sin duda, nunca van a reconocer. Pero el exagerado catalanismo que destilaba es contrario a la línea que Compromís intenta ocultar para no seguir perdiendo votos.
DESAUTORIZACIONES INTERNAS
A todo esto, desde una fiesta en un caso que no debo desvelar pues el hecho aún no ha visto la luz, ha sido alguien de Compromís quien ha evitado que un libro antiguo que demuestra como se escribía valenciano en el siglo XVII según se ve en ese manuscrito, fuera manipulado por un profesor universitario que irradia un pancatalanismo palpable desde el saludo. El intento de catalanizar ese texto antiguo lo han parado desde el mismo Compromís. Llamativo.
Detalles que van en aumento, ellos lo saben, y comienzan a preocuparse, pues el esfuerzo que llevan de décadas para tratar de convertir el sentimiento popular valenciano en lo que ellos quieren, no les está dando el resultado esperado a corto plazo mientras que ven que a medio plazo pueden perder el control del gobierno autonómico y municipales que saben que les tirará par atrás muchos de los “logros” conseguidos, de ahí que traten de utilizar la política del “miedo” llamando ultra derechista a todo lo que se mueve enfrente de su ideología. Suman la cada vez más escasa asistencia a manifestaciones catalanistas por estar mal visto y la división interna que hay entre ellos que no quieren que salga a la luz.
Es cada vez mayor el olor a sangre que destila la herida del pancatalanismo en Valencia, esa debilidad se siente y es acompañada de impopularidad pues el pueblo valenciano no es como lo quieren mostrar ellos. Se saben perdedores. Pero no venderán barata su derrota que llegará más pronto que tarde.
“El miedo es un arma de dominación social y control político”.
Cuando pierdes el miedo dejas de ser dominado. Estamos perdiendo el miedo a que nos llamen de todo por sentirnos valencianos. Que nos lo llamen ellos es un halago.
El movimiento catalanista en Valencia da muestras de agotamiento. Todo esto se está consiguiendo gracias al esfuerzo de muchos en momentos y espacios pequeños que juntos suman uno muy grande. Esto lo detallaré en otro momento.
(Continuará) Hay más cosas.