Tras la sentencia del supremo que obliga a los colegios catalanes a impartir las clases en castellano en un 25%, unos padres han denunciado a un colegio por no cumplir la sentencia.
De inmediato el separatismo radical y fascista catalán no ha dudado ni un momento en salir en tromba a atacar a la familia, incluso un profesor universitario se ofrece en la redes apedrear el domicilio del niño.
Vengo tiempo diciéndolo, vengo tiempo insistiendo, la universidad es el principal foco de la radicalidad separatista en Cataluña, y también lo es en Valencia donde si les seguimos dejando que campen a sus anchas nos convertirán en el estercolero ideológico que ellos quieren que seamos aquí como en Cataluña.
No debemos permitir que en nuestra tierra se adueñen de la cultura y de la lengua como llevan tiempo haciéndolo y no debemos de tolerar que nadie use la violencia para imponerlo como están haciendo en Cataluña.
Todas estas amenazas de allí y todo lo que se está haciendo en la enseñanza en Valencia hay que denunciarlo, hay que hacerlo público. Inspectores, directores, profesores, y padres de alumnos que se adueñan de los Ampas para dirigir ideológicamente tanto el centro de enseñanza correspondiente como los consejos escolares para fomentar la inversión lingüística, tienen que ser denunciados.
Porque si les dejamos aquí campar a sus anchas en poco tiempo también saldrán profesores voluntarios para apedrear las casas de los niños que quieran estudiar en castellano.
Porque de profesores pancatalanistas y directores también pancatalanistas vamos sobrados en Valencia, alguno en puestos políticos importantes. Es lo que buscan y persiguen desde hace tiempo.