Los altares de San Vicente han recibido la noticia de un chantaje en toda regla por parte de Galiana
a través de los medios de comunicación (bueno, de un medio semi oficial), y es que lo que ha sucedido explicado de forma breve es lo siguiente:
Galiana es el presidente de la Junta Central Vicentina (como lo es de la Junta Central Fallera).
La semana pasada se celebró la asamblea de vicentinos con la presidencia del concejal Galiana.
En ella no se habló de nada de subvenciones.
Y de pronto aparece publicado en un diario que "Galiana ofrece a los altares 12.000 euros para los Milagros (obras que consiste en que niños representan los milagros en escenarios montados en la calle) a cambio de colocar él el jurado".
Analicemos. Galiana les dará 12.000 euros a los altares que participen en el concurso, (a todos, no a cada uno), a cambio el concejal pondrá el jurado. ¿Y esto que supone?
Es evidente, cuestión lingüística, si Galiana pone el jurado, las obras que tienen mayor posibilidad de éxito son las que representan los milagros en el valenciano autonómico de la AVL como lo hace el de Chirivella apoyado por el concejal socialista del pueblo, en lugar del valenciano real de la RACV que es el que utilizan la mayoría de altares.
Una vuelta de tuerca más que los niños no hablen en valenciano y si el catalán de la AVL en los milagros.
No hacen nada sin ningún motivo.
La pregunta es ¿se venderán los altares por un plato de lentejas?
(Aunque estén ahogados económicamente, no salen a más de 800 euros cada uno).
Esperaremos noticias.
