OPINIÓN DE PEPE HERRERO

En el día en que el marisco tiembla pensando que será devorado por hordas de sindicalistas tras las manifestaciones que no se sabe bien para que sirven, recuerdo el dicho de que hoy es el único día que los sindicalistas trabajan y es para liarla.

Ciertamente las reivindicaciones han pasado a mejor vida mientras que la izquierda española gobierne apoyados por amigos de terroristas, comunistas y separatistas (lo mejor de cada casa, oiga) y se reducen a movimientos que justifiquen los millones de euros que reciben para tampoco se sabe qué pues su actitud es tan dócil con los que mandan como mordaz y llena de odio contra el empresariado en general.

Sus servicios están más por la labor de defender que éste Gobierno siga que defender a los trabajadores de los abusos, pero no abusos del jefe, no, del propio Gobierno que los fríe (nos fríe) a impuestos para mantener sus estatus y los de sus subvencionados de manera opípara intentando amarrar los votos y con ello las prebendas.

Es penoso ver al del pañuelo en el cuello perder el culo viajando a Francia para defender a los manifestantes que luchan para que no se suba la jubilación de los 62 a los 64 mientras que calla cuando aquí se ha subido de los 65 a los 67. Eso se conoce como “cinismo”, interesado, pero cinismo.

¡FELIZ DÍA DEL MARISCO!